Enseñanza

 

 

“ Había una vez en una pecera dos pequeños peces, conversando.

De repente uno de ellos se puso muy triste, y se fue al otro lado de la pecera.

Entre tanto el otro pececito meditaba en silencio, después de un largo rato,

se acercó al que estaba triste y dijo con gran sabiduría:

 

 - No te aflijas, ciertamente dios existe,

recuerda es él quién nos alimenta y nos cambia el agua a diario.”

 

 


Inicio | La Vuelta al Mundo

Copyrigth 2002© Todos los derechos reservados